El sediento Octavio Paz - Essay Example

El sediento” Octavio Paz La relación entre al autor y su obra tiene muchas dimensiones. Algunos artistas intentan reflejar en su arte su mundo, otros huir de la realidad y de si mismos a sus mundos imaginarios. Aun otros usan el arte como espejo, intentando verse a través de su obra y usándola para comprenderse y conocerse a si mismos. Esta relación es dinámica, a menudo cambia con el tiempo y en el proceso de creación. El tiempo y la reflexión sobre la obra permite al autor ver su trabajo, el proceso de creación, y a menudo también a si mismo de una manera diferente. En el poema de Octavo Paz el autor describe su relación con poesía, que no lo deja indiferente. El poeta intenta buscarse a si mismo en la poesía, pero acaba perdiéndose y aún menos consciente de su identidad creativa; “naufragado en sí” (4). Confundido, decide utilizar la poesía para escapar de si mismo, y evitar la variedad de respuestas, que no le llevaron a ninguna conclusión; al contrario, le dejaron “perdido en la espesura de reflejos” (9-10). Sin embargo, su camino creativo le devuelve al punto de partida; ni búsqueda de su identidad, ni huida de si mismo al mundo de poesía no le permite responder sus preguntas. El poeta se queda con las mismas dudas e inseguridades, que le acompañaban en el principio de su camino. La poesía no le deja satisfacer su “muerte de sed” (18). La búsqueda de si mismo, el intento de comprender propia identidad a través de la obra creativa es el tema principal del “Sediento”. Octavo Paz también trata el tema del sentido de vaciedad interior, de la “sed”, que a menudo es el motivo principal de la creación. El poeta explica la imposibilidad de huirse de uno mismo; hay preguntas y cuestiones que nos van a acompañar siempre. El poema está escrito en el Pasado Simple, ya que el poeta se refiere a los sucesos ya ocurridos. Los verbos en pasado predominan todo el poema con una excepción: al final, el poeta saca la conclusión basada en su experiencia; sabe que ya “no ha de beber en las mismas aguas de espejo” (15-16). En este verso, el poeta usa el tiempo presente para mostrar la lesión que ha aprendido del pasado y la que debe aplicar en el presente. Los pocos sustantivos en el poema aparecen en el sentido figurativo, con la referencia a la experiencia propia del autor. El titular “sediente” es el poeta que desea ansiosamente encontrar las preguntas acerca si mismo, conocer y entender su identidad. Su “desnudez” (14) se refiere a la falta de claras ideas y respuestas en su vida, a la vaciedad interior que, a pesar de sus esfuerzos, no puede llenar. El “espejo” (15, 17) es el imagen de si mismo que el poeta intenta crear a través de la poesía; las “aguas de espejo” (15) se refieren a las complejas y confusas ideas, que el poeta encuentra en su camino; estas ideas no le dan respuestas a sus preguntas, sino al contrario provocan aún más confusión e inseguridad. El poeta escribe la palabra “poesía” con mayúscula (1,5), así dándole significado personal. La poesía es el interlocutor del dialogo, un ser real y casi físico, que trata el autor con ciertas actitudes y que tiene su propia manera de ser. El uso de “poesía” con mayúscula también demuestra el gran respeto y admiración del autor hacía esta forma del arte. El poeta trata la poesía como el ser superior, capaz de resolver sus problemas existenciales y ayudarle a encontrar su identidad. El uso del tiempo pasado permite al lector separar el pasado el poeta de su presente y clasificar su búsqueda de identidad en la poesía como una experiencia vivida en el pasado, a la que ya no vuelve. “Busqué…naufragué…perdi” (2-10) son eventos pasados, que forman parte de la experiencia vivida del autor. Solo al ver estos tres verbos el lector puede sacar conclusión sobre la experiencia del poeta: la búsqueda de si mismo a través de la poesía no le ayudó a aclarar las preguntas acerca su identidad sino le provocó aún más confusión. Finalmente, el tiempo presente le acuerda al lector de la importancia de aprender del pasado para entender el presente y no volver a cometer los mismos errores. El imagen fundamental del poema presenta el poeta-ser creativo, que intenta comprender a si mismo a través de la poesía. El poeta relata su experiencia con el sentido de vaciedad y confusión ya que está desilusionado con falta de claras respuestas a pesar de todo su esfuerzo. Aunque su actitud hacía poesía es llena de respeto, no se puede evitar el sentimiento de decepción que le acompaña al poeta. Las palabras con el sentido negativo, como “deshecha” (3) y “naufragué” (6), reflejan la decepción y falta de esperanza que siente el poeta. El poeta pregunta a si mismo, como los personajes de la famosa pintura de Paul Gaugin, “? De donde vengo ? Quién soy? A dónde voy? “. Esta pregunta, que acompaña a la humanidad desde el comienzo de los siglos, ha provocado muchas respuestas a través de la arte: literatura, música, pintura. Sin embargo, el autoanálisis creativo que acompaña el proceso creativo no tiene claras respuestas; al contrario, provoca más complejas y confusas preguntas. La obra de arte le permite al autor verse a si mismo de una nueva perspectiva y, por lo tanto, causar nuevas dudas y preguntas acerca su identidad. De la misma manera, mucha gente utiliza el paso del tiempo. Es muy común reflexionar sobre su pasado para comprender su presente; creemos, que ver la experiencia pasada de la perspectiva presente nos permite crear quienes éramos en el pasado y quienes somos ahora. A menudo manipulamos el tiempo, dando la mayor importancia a las experiencias que nos parecen más importantes para nuestra presente imagen. Por eso, en diferentes etapas de la vida y en contextos diferentes a menudo relacionamos las mismas experiencias con comentarios distintos, dándoles nuevo significado. El presente cambia nuestra percepción del pasado y influye en el imagen que creemos crear acerca nosotros mismos en el futuro. Nuestros presentes valores, objetivos, deseos nos permiten crear las interpretaciones diferentes del tiempo pasado. De todas formas, a menudo, como al “Sediento”, el análisis de nuestro pasado no nos permite aclarar el presente, sino, al contrario, nos deja más confusos e inseguros de quienes somos. Nuevas interpretaciones de experiencias pasadas que aparecen con el tiempo, diferentes maneras de ver las mismas situaciones, creen nuevas preguntas acerca nuestra identidad. Por lo tanto, el análisis de nuestro pasado cree mucha confusión acerca nuestro presente y futuro. Igual que “el Sediento” nos perdimos en “la espesura de reflejos” (9) de nuestra identidad. Las mujeres intentan dar al tiempo el valor sentimental, ordenar el tiempo según sus valores: dan mucha importancia a los cumpleaños, aniversarios, fechas que les recuerdan los eventos importantes del pasado. Como el poeta usa la poesía para encontrar si mismo, las mujeres utilizan las fechas para definir y comprender los papeles que interpretan en la vida: hija, novia, madre, esposa, compañera. Miden el tiempo de una manera emocional, según los eventos que han tenido importancia en sus vidas. Al contrario, los hombres no prestan mucha atención al tiempo; a menudo, igual que el poeta que huye de si mismo al mundo de poesía, escapan de sus papeles sociales olvidando los días y las ocasiones que les obligan a comportarse de una manera determinada. De todos modos los hombres y las mujeres, por lo mucho que usen el tiempo para comprender sus identidades o huir de ellas, a menudo vuelven al punto de partida. Así que, la búsqueda de respuestas, sea a través de la poesía, el arte, o autoanálisis, nos deja con aún más preguntas, los “mismos muertos de sed”. Read More